El tiempo libre juega un papel indispensable para el bienestar emocional y mental de las personas.
En sociedad se puede escuchar a menudo decir que no alcanza el tiempo para las pausas, lo cual se atribuye a: trabajo, relaciones interpersonales, responsabilidades académicas y en ocasiones la propia percepción que se tiene hacia el tiempo libre.
Esta saturación en agenda provoca en las personas un malestar interno que se ve reflejado en su desempeño y convivencia diaria con el mundo externo.
La idea que se tiene de ocio o tiempo libre no se suele relacionar con la palabra “negocio”. Considerándose esto como vagabundería o como algo negativo debido a los continuos mensajes de productividad que se reciben en este mundo que avanza a pasos agigantados.
Muchas personas incluso experimentan culpa cuando se dedican espacios a sí mismos o a disfrutar de la vida y de aquello que les hace felices, lo cual genera repercusiones a nivel emocional y mental.
Incorporar pausas en su vida y una visión positiva del tiempo libre es parte de una buena salud mental.
¿Por qué son importantes las pausas?
- Construcción de cada persona
Debido a que se pueden dedicar estos espacios a aquello que siempre se soñó hacer y nunca se pudo por diferentes situaciones, cada persona puede identificar en sí misma pasatiempos, ideas, y nuevas áreas en las que puede destacar ya sea hacia lo interno o hacia lo externo.
- Contactar con lo verdaderamente importante
Permitirá a cada persona identificar aquellos aspectos de su vida que son importantes y que ha dejado de lado por la rapidez con la que el mundo avanza. Esta reconexión brindará sensación de bienestar consigo mismo, crecimiento personal y se verá una mejoría en la gestión del estrés.
- Cambiar la rutina y los escenarios
La estructura es indispensable para poder alcanzar objetivos, buena parte de la vida de los seres humanos consta de rutinas, lo cual no está mal. Sin embargo, en ocasiones el cambio en la rutina diaria y en los escenarios puede ayudar a aumentar creatividad y mejorar la motivación intrínseca.
- Es un reinicie
Las pausas y los tiempos libres permitirán que cada uno pueda “reiniciarse” para lograr una mejor conexión con aquello que hace y se sienta más ligero en el transitar de la vida.
- La forma en que nos relacionamos (mantener conversaciones en otros momentos)
El incorporar las pausas y el tiempo libre en la vida va a permitir también que las relaciones interpersonales mejoren. Esto porque se aprende a manejar la ansiedad, el estrés, a organizar el tiempo y a valorar verdaderamente presente cada espacio que se comparte con otros. Sin culpa, sin remordimiento.
Las pausas deben ser educadas
Como la mayoría de las cosas en la vida, es importante que exista un balance. Lo más importante es que cada pausa que se realice sea verdaderamente consciente para ser disfrutada, de manera que cumpla el objetivo de manejar la ansiedad y el estrés.
Aunque suena contradictorio, las pausas pueden generar más ansiedad. Esto precisamente al concepto que se tiene del tiempo libre y que se traduce en la vida cotidiana como: disculparse por desconectarse del trabajo a la hora en punto del fin de jornada o sentir la necesidad de mentir con tener otros planes con otras personas cuando en realidad lo que se quiere es dedicar tiempo a sí mismo.
¿Cómo se ven las pausas?
- Retomar un libro que está pendiente en la mesa de noche
- Aprender a hacer una receta que siempre se ha querido aprender
- Retomar las clases de tejido
- Dedicar tiempo a bailar, hacer actividad física
- Jugar con los hijos de forma consciente y completa, sin trabajo de por medio
- Planear paseos los fines de semana
- Dedicar algunos minutos al día para tomarse su bebida caliente favorita
- Realizarse un masaje en los pies
- Dedicar espacios a cuidado personal como mascarillas, exfoliaciones, entre otros…
Las pausas realmente no deben implicar tanto esfuerzo porque salen del mismo deseo y pasión de la persona. Lo importante es que sean disfrutadas y visualizadas como lo que son: inversión en salud mental y emocional.